jueves, 24 de julio de 2014

SUBVENCION PARA LA RED INALAMBRICA EN HOTELES Y ALOJAMIENTOS

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo, del Gobierno de España, a través del programa Red.es ha ampliado el plazo de presentación de solicitudes para la instalación y despliegue de redes inalámbricas Wifi en HOTELES.
 
Es una oportunidad que se ofrece a las empresas hoteleras para ampliar el servicio del establecimiento a sus clientes de forma gratuita.
 
La verdad es que, si antes nos extrañaba que todavía existieran hoteles que cobrasen por el uso de internet (el otro día me pasó, precisamente en Tarragona, en donde a los extras de tasas turísticas, se le sumaba los servicios por conectarme a internet), ahora extrañará todavía más, dada la subvención que se presenta, en donde se facilita tremendamente la obtención de la misma, y en donde los trámites son cada día más fáciles.
 
Se trata de una ayuda de un 80% del total invertido (De 5.000 € hasta 25.000 €) para instalar, o mejorar, redes inalámbricas y dirigida a establecimientos hoteleros.
 
Incluye hasta la contratación de una nueva línea de acceso a Internet o mejora de la actual que dé soporte a la red inalámbrica, contemplando los gastos asociados al alta y hasta un máximo de 3 meses de servicio.
 
Todo el proceso de solicitud y tramitación de la ayuda se hace de manera telemática a través de la sede electrónica de Red.es.

El plazo de solicitud finaliza el 19 de septiembre (Ojo, hasta las 13:00 horas !!!!!!!  )

martes, 8 de julio de 2014

EL CABALLO Y EL TURISMO EN ANDALUCIA

Este mes se han presentado los Trabajos Fin de Curso de la Escuela de Turismo EUSA-Universidad de Sevilla, y entre ellos, uno sobre las rutas turísticas ecuestres de Andalucía.

Son ya unas cuantas las iniciativas que se han puesto en marcha en este sentido, y no faltan argumentos al respecto, pero no terminan de consolidarse, aún siendo tremendamente atractivas.
Por otro lado, mi amigo Paco Benítez, diserta en sus habituales columnas, sobre la idoneidad de que las federaciones deportivas se inmiscuyan en el futuro Plan de Turismo Ecuestre, aludiendo al indudable sentido deportivo que deben tener las mismas.

Es necesario hacer una reflexión al respecto, diferenciando lo deportivo, de lo lúdico y encontrando parcelas transversales en las que, por activa o por pasiva, el caballo encuentra su protagonismo turístico.
En primer lugar, el mundo del caballo arrastra una gran cantidad de recursos propios que los hace inconfundibles y diferenciadores. El caballo “engancha”, gusta y contiene grandes dosis de atracción por el carácter humano y natural que tiene la relación entre el hombre y el animal. Un ejemplo claro que nos lleva a las bases naturales de esta relación, son los beneficios que el caballo tiene para la mejora de los comportamientos en los discapacitados.

Más allá de este ejemplo, el caballo ha estado presente en todas las civilizaciones y culturas, y hoy permanece en el mundo actual y moderno sobre dos grandes bloques: El deportivo, a través de sus distintas disciplinas ecuestres (incluyendo las  Carreras de Caballos), y el lúdico, en donde el paseo, manifestaciones populares, ferias y fiestas religiosas, tienen un protagonismo principal.
Así pues, el mundo del caballo es atractivo, para propios y para extraños. El caballo es cultura e identidad, y en el caso de Andalucía es fortaleza y oportunidad (en el sentido estricto de las estrategias).

Si nos centramos en el Turismo Ecuestre, estamos hablando de ciertas actividades en torno al mundo del caballo, que se realizan específicamente para atraer un turismo que hará uso de esos recursos ecuestres puestos a su disposición. Concretamente podemos identificar excursiones, rutas y caminos específicos de interés, visitas a ganaderías y yeguadas, alojamiento en “posadas ecuestres”,… son actividades que se realizan en cualquier momento y que se organizan ex profeso, acudiendo en más o menos medida a otros recursos netamente turísticos.
Pero quizás el elemento que hoy arrastra más turismo se centra en  un elemento que es común: El evento.

Hablamos de evento, cuando se organiza un acto que concentra a personas en torno a unas actividades. Indudablemente el evento lleva aparejada unas connotaciones turísticas centradas en los recursos y consecuentemente, unos impactos económicos.
En esto, somos conscientes los que trabajamos directamente en las operaciones turísticas, y desde siempre se ha identificado que la mejor inversión en un destino turístico es la que se realiza en la organización de eventos diversos y de cualquier índole que no solo atraiga turistas, sino que además sirva de reclamo.

Un claro ejemplo de evento ecuestre puede ser el SICAB, en donde el Caballo de Pura Raza Española (PRE) asume el protagonismo durante una semana, suponiendo unos impactos económicos derivados del turismo de gran relevancia para la ciudad, en incluso provincia, de Sevilla.
No vamos a un destino turístico y de paso vemos un evento ecuestre. Vamos a un evento ecuestre y de paso hacemos turismo.

Otro ejemplo lo encontramos en el futuro “Costa del Sol Equestrian Tour”, en Mijas, Málaga. Una competición ecuestre internacional de saltos de obstáculos, que albergará un relevante número de participantes en torno a dos ciclos de un mes de duración cada uno.   Junto a ello, y en paralelo, la Costa del Sol como destino turístico. Ambos, se complementan: el primero porque utiliza la Costa del Sol como argumento de venta de la competición; el segundo porque aprovecha la sinergias e impactos indirectos del evento para potenciar, promocionar y desestacionalizar el destino.
Este evento va a suponer un gran movimiento de personas del entorno ecuestre (potenciales turistas), en meses que no son especialmente relevantes en materia turística, como son los meses de noviembre o de febrero, contribuyendo, junto a otros eventos deportivos como el golf, a la desestacionalización turística de la Costa del Sol.

Los impactos económicos derivados de un evento son diversos, con factores multiplicadores basados en el número de personas y en la duración del evento.
Identificamos unos impactos directos, derivados del propio evento: Contratación de personal, presupuestos de inversiones, obras, organización, manutenciones, auxiliares, inscripciones y premios,… También se identifican unos impactos directos derivados del movimiento de personas y equipos: Gasto de desplazamientos (Ave, Avión, Gasolina, Coche alquiler,…), Transporte de animales, Alojamiento, Restauración,… y por último se identifican unos impactos indirectos derivados de la actividad turística y lúdica: Visitas culturales en el radio de 1,5 horas, parques temáticos,… sin olvidar los impactos indirectos de pequeña relevancia derivado de la vida cotidiana: taxis, autobuses, gastos corrientes,…

Así pues, evento y turismo van unidos sobre un relevante impacto económico en el destino.
En un ámbito más amplio, la profusión de una marca se traduce en el protagonismo que adquieran los diversos elementos y eventos que se produzcan. Por ejemplo, la pérdida de España en el mundial, provoca pérdidas insospechadas de un posible potencial publicitario en materia de turismo sobre el destino España.

De este modo, una parte importante de las estrategias para la gestión del turismo debe encontrarse en los grandes eventos deportivos, que no solo contribuyen a nivel local al desarrollo turístico, sino que juega un papel importante en la promoción de los destinos.
Y viceversa, una parte importante de las estrategias para la gestión de los eventos deportivos debe encontrarse en los grandes recursos turísticos, que no solo contribuyen como reclamo complementario, sino que juega un papel importante en el éxito global del evento.